El proyecto de investigación conjunto de la Universidad Saskatchewan y el Centro de Investigación de Neurorregeneración del Hospital McLean* arroja algo de esperanza para los pacientes de alzhéimer y párkinson. El objetivo es servirse de células madre para reparar los circuitos cerebrales produciendo dopamina, producto químico esencial destruido por la enfermedad. «La particularidad de esta tecnología es que utiliza las células madre de los pacientes. Estas células extraídas de la piel o la sangre serán convertidas en células cerebrales. Una vez injertadas, ellas se encargarán de hacer el resto», declara el doctor Ivar Mendez, líder del programa de regeneración del cerebro.
* El hospital McLean se encuentra en Massachusetts y está asociado a la Harvard Medical School
