La terapia por perfusión está indicada cuando el paciente no puede tomar la medicación por vía oral, cuando la vía oral degrada el producto o cuando se quiere obtener una efectividad más rápida en patologías potencialmente graves.
Tanto si han de ser reconstituidos como si están listos para usar, algunos de estos medicamentos, como los antibióticos, los analgésicos o los medicamentos contra el cáncer, son administrados por vía intravenosa. Son envasados en bolsas PP o PVC en función de las posibles interacciones entre recipiente y contenido.