La IA y la salud: una alianza prometedora

 

 

 

 

 

 

 

A finales del siglo XX, el objetivo de la inteligencia artificial (IA) era ser capaz de razonar como un ser humano, basándose en dos elementos: la lógica y los datos. Si la aplicamos al campo de la medicina, la IA será capaz de predecir una enfermedad y su evolución, anticipar una epidemia, preparar un tratamiento personalizado o incluso establecer un diagnóstico.

En el ámbito de la inmunoterapia, el futuro de la IA es prometedor, como así lo demuestra un reciente estudio francés. La inmunoterapia es un tratamiento que estimula el sistema inmunitario con la finalidad de reforzar las defensas del enfermo. A pesar de que se aplica ampliamente en oncología, solo un 30 % de los enfermos responden positivamente al tratamiento sin que se conozca realmente la causa para ello. El algoritmo, diseñado en colaboración con médicos-investigadores del Instituto Gustave-Roussy, del Instituto Nacional de la Salud y la Investigación Médica francés (INSERM) e ingenieros de la Central de Supélec, analiza las imágenes que obtiene el escáner y elabora una firma computacional[i]. Esta firma podría incluso llegar a ser capaz de predecir la eficacia del tratamiento en el paciente. Para lograr un resultado así el sistema informático se ha alimentado sin descanso con miles de imágenes de escáneres, a partir de los exámenes realizados en 500 pacientes. De esta forma el sistema ha aprendido a identificar los distintos tumores en los que la inmunoterapia resultaba más eficaz. Así es como la IA ha podido proporcionar una información fiable examinando una imagen médica y sin biopsia, lo que ha permitido luego evaluarla en nuevos pacientes.

En los Estados Unidos, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) acaba de conceder una autorización de comercialización a un programa de cribado. Para ello se ha basado en un estudio clínico efectuado con 900 participantes afectados o no de retinopatía. En 9 de cada 10 casos, el programa acertó el diagnóstico. El programa informático, preparado para detectar los signos precursores de una retinopatía[ii], utiliza un algoritmo de inteligencia artificial. En el trascurso de una simple visita médica de rutina, la IA analiza las imágenes de los ojos de los pacientes tomadas por una cámara retiniana. En tan solo unos minutos y sin intervención humana, el programa ofrece un diagnóstico, su interpretación, el correspondiente informe y las instrucciones de los cuidados. Las instrucciones cumplen totalmente con las prácticas en vigor de la Academia Americana de Oftalmología. El programa, llamado IDx-DR, lo pueden utilizar los profesionales sanitarios para ofrecer una evaluación inmediata y fiable de la retinopatía diabética. Los pacientes se benefician de un diagnóstico precoz de la enfermedad, evitando así una posible ceguera.

Otro ámbito en el que la inteligencia artificial está dando resultados excelentes es la dermatología. En el 2017, unos investigadores americanos utilizaron el programa «Show and Tell» desarrollado por Google. Este programa se basa en el concepto de «Deep Learning» o de aprendizaje profundo, y funciona consultando millones de imágenes registradas por el ser humano hasta convertirse en autónomo y ser capaz de elaborar sus propios comentarios. Después de analizar más de 130 000 imágenes, la IA ha aprendido a diferenciar entre varios centenares de enfermedades de la piel con una tasa de precisión del 94 %. También en Estados Unidos, un estudio publicado la primavera pasada confirma la fiabilidad de la IA. El ordenador analizó un centenar de imágenes de melanomas y nevos[iii] benignos, logrando identificar un 95 % de los melanomas (en contraposición al 87 % detectado por los dermatólogos). También disminuyó los «falsos positivos4», lo que permitió evitar intervenciones quirúrgicas inútiles. El programa tuvo que asimilar un total de 100 000 imágenes de lesiones cutáneas para lograr un resultado de este calibre.

Solo han sido necesarias algunas décadas para que la inteligencia artificial haya pasado de la teoría a la realidad. Y todo esto ha sido posible gracias a los gigantes de la industria digital: las empresas GAFAM5. Estas empresas son a día de hoy las únicas que disponen de plataformas lo suficientemente potentes como para recopilar, almacenar y analizar un volumen de datos de tal magnitud. Este increíble potencial y las innegables ventajas que ofrece nos auguran un prometedor futuro para la inteligencia artificial.

La intelligencia artificial en cifras

  • Un mercado previsto para el 2024 de 11 100 millones de dólares frente los 200 millones del 2015.
  • 1550 start-up en 70 países, de las cuales 270 en Francia y 499 en los Estados Unidos.
  • Inversiones en Francia: 1500 millones de €
  • Inversiones en los Estados Unidos: 4000 millones de $
  • Inversiones en China: 5000 millones de $

¹ La imaginería médica computacional o radiómica consiste en el análisis informático de imágenes médicas y en cómo se traducen en datos susceptibles de estudio.
² La retinopatía diabética es una complicación de la diabetes de tipo II que afecta a un 50 % de los pacientes. En Francia es la principal causa de ceguera en las personas menores de 65 años.
³ Mancha natural de color marrón en la piel
4 En contraposición a los «falsos positivos», el «falso negativo» revela un resultado positivo desacreditado por las pruebas complementarias.
5 Acrónimo que designa las empresas más importantes del mundo de Internet: Google, Apple, Facebook, Amazon y Microsoft.