Julien Cavelier para Flexmag
«Desde septiembre de 2009, sigo una formación en Ingeniería del ISPA, que combina la cultura científica y técnica con la realidad industrial gracias a los periodos de formación en empresa.
No quería que la empresa que me formara fuera un mero centro de producción o una filial de un gran grupo industrial. Fue un antiguo profesor el que me aconsejó Technoflex, asegurándome que no me arrepentiría. Su dimensión humana y mi curiosidad por la industria farmacéutica me han llevado a comprometerme con Technoflex.
Las tecnologías y la innovación son los dos elementos esenciales de la formación teórica impartida en el ISPA, los cuales son, evidentemente, fundamentales en mi trabajo dentro del departamento I+D. La mayoría de proyectos que se me encargan consisten en hacer que una idea se convierta en producto. El objetivo es optimizar, desde la concepción, cada fase de la vida del producto, que ha de ser siempre respetuoso con el ser humano y el medio ambiente.
Todo el mundo quiere un aprendiz
«Tener un aprendiz con contrato formativo en nuestro servicio nos permite incorporar futuros colaboradores en la plantilla. Pero sobre todo nos aporta una visión diferente a la del personal interno, acostumbrado a una cierta rutina. Este cuestionamiento de las rutinas de trabajo es una ventaja nada despreciable», subraya François Capitaine, Director I+D de Technoflex